La neuromoralidad es un campo emergente de la neurociencia que estudia la conexión entre la moral y la función neuronal.
La corteza prefrontal ventromedial es el centro del circuito neuromoral que permite el procesamiento de estímulos con carga moral y la posterior generación de estados como la empatía, la caridad, la justicia y la culpa.
[18] [19] [20] La amígdala permite el reconocimiento sensorial de estímulos emocionales no integrados que se canalizan a la corteza prefrontal ventromedial para su indexación y procesamiento moral.
[11] La psicopatía es un trastorno cerebral caracterizado por falta de emociones morales, empatía, remordimiento y culpa.
[21] [22] Las neuroimágenes del cerebro psicopático han revelado hipoperfusión e hipometabolismo en áreas de la corteza frontal.
[53] La disfunción del cíngulo anterior se ha relacionado con un bajo procesamiento emocional y una mayor agresividad.
[54] [55] Como en el caso de Michael, el daño a la corteza orbitofrontal se ha vinculado con el comportamiento antisocial y criminal.
[56] [57] El daño a la corteza prefrontal ventromedial se ha vinculado con el comportamiento antisocial, la toma de decisiones deficiente y amoral y la respuesta autónoma reducida a los estímulos emocionalmente estimulantes.
[58] Se ha propuesto que la evidencia relacionada con la función del circuito neuromoral sea una nueva vía hacia la justicia de los delincuentes.