Asistía a clases nocturnas para mejorar sus conocimientos de matemáticas y física.
Hizo viajes a Inglaterra y Austria e introdujo diversas mejoras ferroviarias que llevan su nombre.
Después de muchos ensayos, Riggenbach descubrió que la seguridad de la explotación aumenta en los tramos con mucha pendiente si la locomotora posee una rueda dentada o piñón que se engrana en una cremallera colocada en la vía.
Un sistema muy parecido se había utilizado poco antes en el ferrocarril de Mount Washington (New Hampshire, EE. UU.
En 1882 construyó el Elevador do Bom Jesus en Portugal, que aún sigue en servicio, y desde 1883 trabajó por su cuenta para diversos ferrocarriles de montaña en varios continentes.