En la mayor parte del municipio predomina un clima semicálido y semiseco, influyendo, en gran forma para ello, el Bolsón de Mapimí, la gran parte desértica que predomina en el municipio.
El poblado debe su nombre al conquistador español Francisco de Ojuela, quien descubrió la riqueza mineral del lugar.
Para la segunda mitad del siglo XIX Ojuela fue toda una ciudad, bien trazada y organizada en las cimas de las barrancas, con los servicios y comodidades que requería una población moderna de la época, con sus calles empedradas.
[1] En el año de 1927 adquiere fama mundial al ser visitada por el mineralogista W.F, Foshag; actualmente en esta mina se han encontrado 117 especímenes minerales entre los que destacan Adamita, Legrandita y Kottigita.
En 2014 se tuvo un aproximado de 11 mil visitas; la mayoría en Semana Santa, verano y época navideña.
Este turismo se ha ido incrementando 60 por ciento desde que Mapimí es pueblo mágico.
El desarrollo moderno comenzó a partir de 1896, ya en la época del Porfiriato.
En Bermejillo el ferrocarril de Mapimí no sólo se conectaba con el Ferrocarril Central, sino también con un ramal poco conocido hacia Tlahualilo, Dgo, desde donde a su vez, existía un ramal que conectaba este poblado con el Ferrocarril Internacional que desde 1902 iba a Eagle Pass, Texas, lo que le permitía un segundo acceso a Estados Unidos además de Juárez/El Paso.
Este sistema era muy usado en ferrocarriles de montaña, donde hubiera pendientes escarpadas y curvas muy cerradas.
En cuanto a las locomotoras de cremallera, Baldwin entregó 2 entre 1898 y 1900, tenían calderas inclinadas.
Ambas locomotoras debían viajar con los vagones enganchados por delante al ascender a la montaña, de modo que iban empujándolos, esto para evitar perder un vagón en caso de desengancharse.
No solo se transportó el mineral, todos los equipos pesados y voluminosos que hubo en la mina fueron llevados por tren.
El vehículo particular se utilizaba tanto en la línea principal como en el ramal a Ojuela.
Durante la Revolución Mexicana las tropas Villistas tomaron Mapimí, sin embargo, no hubo afectación a las instalaciones de Ojuela o la fundidora en el pueblo, sobre este aspecto, se ha especulado que existía alguna especie de acuerdo verbal, por el cual Pancho Villa no afectaba los intereses alemanes en México, de modo que las minera Peñoles fue relativamente respetada y sus empresarios no tuvieron que proporcionar “préstamos” para la causa, a diferencia de los empresarios norteamericanos.
Pocos vestigios quedan del ferrocarril, hoy en día el trazado a Bermejillo lo ocupa la carretera, sin embargo es posible ver en algunos lugares los terraplenes de la antigua vía, el tramo a Ojuela se convirtió en el acceso de los vehículos al lugar.