[2] Otiñano fue lugar de señorío nobiliario, y perteneció a la Berrueza hasta 1456.
Pocos años después la princesa Leonor entregó todo su término municipal a Torralba del Río en cumplimiento de alguna deuda.
En el momento del traspaso se encontraba despoblado y en el acuerdo se estableció como condición que aunque el pueblo volviera a poblarse, cosa que sucedió, sus vecinos estarían siempre sometidos a la jurisdicción de la localidad vecina.
Del templo originario sólo se conservan un capitel, reaprovechado en el pórtico de la entrada, y la pila bautismal.
Construida en sillar y sillarejo, tiene planta de cruz latina, con nave única.