En 1941 Sturmbannführer Thorbeck fue nombrado juez de la SS y de la policía en Múnich en donde el Standartenführer Walter Huppenkothen era el fiscal.
El 8 de abril de 1945, instruido por Ernst Kaltenbrunner, preside un tribunal militar sin testigos en Flossenbürg, condenando a muerte a Dietrich Bonhoeffer, Hans von Dohnanyi, el General Hans Oster, el Dr. Karl Sack, Ludwig Gehre y Wilhelm Canaris.
[1] Al día siguiente fueron colgados con cuerdas de piano, y dos semanas después los aliados liberaban la prisión de Flossenburg.
Después de la guerra trabajó como abogado en Núremberg y en 1955 fue encausado, cumpliendo cuatro años en prisión.
En 1956 fue exonerado porque el tribunal consideró que los conspiradores de un régimen podían ser juzgados como traidores.