Pacific Drive (videojuego)

Pacific Drive es un videojuego de supervivencia desarrollado por Ironwood Studios y publicado por Kepler Interactive en 2024.

El juego se desarrolla en el noroeste del Pacífico, que el jugador recorre a pie o en una camioneta mientras intenta encontrar una forma de escapar.

Utiliza una perspectiva en primera persona; el jugador debe intentar evitar anomalías y obstáculos.

Algunas áreas también están irradiadas, lo que daña activamente al jugador y corroe lentamente el coche.

Además, las zonas pueden desarrollar ocasionalmente ciertas condiciones que añaden complejidad adicional, como explosiones más potentes o oscuridad extrema.

Ophelia "Oppy" Turner, su marido Allen y sus colegas, entre los que se encuentran los científicos Tobias Barlow y Francis Cooke, desarrollan la "tecnología LIM", una revolucionaria tecnología experimental, con la cooperación del gobierno de los Estados Unidos.

El grupo finalmente localiza la fuente dentro de la Zona Profunda, pero como su red eléctrica está desactivada y el acceso es imposible, idean un plan para poner en marcha la red utilizando la camioneta y sus propios suministros de batería; sin embargo, cuando un pico de voltaje daña las baterías, Tobias se sacrifica para completar el plan y llevar al Conductor a la Zona Profunda.

[5]​[6]​[7]​ Concibió el concepto de "Pacific Drive" mientras conducía por la Península Olímpica; sintió que conducir por el noroeste del Pacífico "en una carretera solitaria... y la radio está tocando una melodía determinada, puede ser realmente memorable", comparándolo con su infancia en Portland, Oregón.

[1]​ Los experimentos iniciales con enemigos controlados mediante inteligencia artificial fueron descartados porque su comportamiento era demasiado difícil de interpretar mientras se conducía.

La aleatorización del mundo se inspiró en el trabajo de Derek Yu en Spelunky y el libro posterior para Boss Fight Books.

[15]​ En junio, Ironwood Studios anunció que se había asociado con Kepler Interactive para publicar el juego.

[25]​ Push Square's Stephen Tailby felt the vehicle maintenance added "a great sense of progression",[2]​ and Shacknews's Denzer enjoyed the car's customizability options but occasionally found it inexplicably awkward to drive.

[26]​ Some reviewers considered the maintenance overwhelming and tiresome;[21]​[24]​ IGN's Sarah Thwaites wrote that "getting stuck with a quirk you can't figure out is a real momentum killer".

[24]​ GameSpot's Delaney found the driving more "engaging and enjoyable" than other games.

[23]​ Some critics criticized the user interface's tedious and complicated design and controls;[2]​[26]​ Eurogamer's Chris Tapsell felt it "must have at least partially been designed to be deliberately awkward".