Ante esta circunstancia la obra fue confiada al arquitecto Pietro Fossati, quien fue asistido por su hermano de profesión escultor.
La obra fue llevada adelante por tallistas, herreros, pintores y jardineros, todos traídos del extranjero especialmente para esta construcción.
Su frente, enmarcado por dos torres simétricas ubicadas en las esquinas, está adornado con un friso con motivos clásicos y un barandal que en su centro tiene el escudo provincial.
El interior del Palacio estaba decorado con buen gusto y elegancia, con cuadros y murales como los del artista uruguayo Juan Manuel Blanes, quien pintó una serie de batallas en las que participara el general.
[2]En sus jardines hay bustos de hombres célebres como Napoleón, Hernán Cortés, Alejandro Magno y Julio César, y esculturas del entrerriano León Sola, quien realizara estudios en Italia, solventados por el general Urquiza.
Cabe destacar que el Palacio San José contó desde 1856 con servicios de aguas corrientes, que aún hoy funcionan, cuya toma estaba en el río Gualeguaychú, distante a 2 km del lugar.
Sus dos torres se alzan desde los extremos de la vivienda enfatizando la simetría del conjunto.
La primera construcción se orienta al este hacia el camino con Concepción del Uruguay.
A diferencia de la construcción del primero, los muros construidos por Dellepiane utilizan la cal.
En 1857 el arquitecto Pedro Fossati, italiano nacido en 1827 y graduado en el Politécnico de Milán, toma el cargo de construir edificios en Concepción del Uruguay e inicia tareas en San José reformulando la capilla cambiando su planta en octogonal y simétrica para un mejor orden de los espacios.
En los jardines posteriores y sobre el costado norte se encuentra la Capilla de San José, para la cual Urquiza obtuvo una licencia del Vaticano.
Este lugar fue muy importante para la historia argentina ya que en él se redactó la primera Constitución Nacional de 1853.