Palacio del Marqués de Molins

Se ordenaron los espacios interiores creándose una serie de galerías, despachos para diversos usos y una escalera secundaria con un ascensor.

Aparte de todo esto, un gran salón rectangular se habilitó para diversos usos, reuniones y comidas académicas.

Todos los mencionados trabajos se ejecutaron entre 1974 y 1976, siendo todavía Jesús Pabón director de la Real Academia.

Tiene una fachada armoniosa, sencilla pero elegante, con una portada de granito unida al balcón principal donde lucen las armas del marqués, que fue su constructor y propietario.

Recibe este nombre por las columnas de mármol blanco que enmarcan sus huecos y paneles decorativos.