En cambio, la almendra era antiguamente un producto caro, que denotaba estatus social.
Se elabora a base de higos secos formando estos al final una pasta compacta y densa.
[9] Luego, el molde era prensado y almacenado por unos meses hasta formar una masa fermentada convertida en torta dulce semidura.
[2][11] En las Baleares, se macera en aguardiente aromatizado con anís, hinojo y varias hierbas mediterráneas, todo ello prensado en un molde.
Tras ello, el pan de higos se vuelve a secar, tradicionalmente bajo el sol, y actualmente en horno.