La pandemia de gripe A (H1N1), que se inició en 2009, llegó a Puerto Rico el 26 de mayo del mismo año cuando se confirmó el primer caso de esta pandemia en la isla.
[2] El gobernador Luis Fortuño confirmó en conferencia de prensa la primera muerte en Puerto Rico directamente atribuida al contagio por la gripe A (H1N1), por lo que anunció que se elevaría de 4 a 5 el nivel de alerta en la isla.
[5] También las autoridades informaron que en Puerto Rico se producían aproximadamente 400 contagios por día, y de una a dos muertes.
[6] Mientras la gripe seguía avanzando en la isla (llegando a 52 casos confirmados y más de 600 casos probables) el número de víctimas subió el 19 de julio de 2009 a 6, y otras 17 seguían bajo investigación.
[8] Las muertes en Puerto Rico seguían aumentando hasta llegar a 10, y los casos de gripe confirmados aumentaron a 143 el 30 de julio de 2009.