Parantechinus apicalis

La boca está armada con pequeños dientes afilados que indican hábitos carnívoros.

Los pies son anchos, las almohadillas plantares presentan marcados surcos que les permiten trepar a árboles y escalar rocas.

Complementan su dieta con grandes insectos terrestres y polen de distintas flores e incluso miel.

Las hembras son monoéstricas y paren camadas de 8 o más crías.

La madurez sexual se alcanza aproximadamente al año de edad.