La zona era el cruce del río Xanaes o Segundo en el camino que unía el puerto de Buenos Aires con el Alto Perú y por tanto punto estratégico regional.
Belgrano llegó a Villa del Rosario a fines de febrero de 1819 estableciendo su cuartel en las márgenes del Río Segundo o Xanaes.
En 2009 las autoridades locales restauraron el lugar en forma de paseo turístico y para la memoria.
Se reconstruyó el antiguo monolito recordatorio y se agregaron dos monumentos históricos, uno en homenaje a Manuel Belgrano y el otro, una obra escultórica, dedicado a la memoria de los villarosarienses que se sumaron a la causa de la lucha gaucha con las Tropas de Belgrano.
Además se instalaron juegos infantiles y servicios para los turistas que decidan pasar la jornada a la vera del Xanaes.