El pastor polaco es un perro musculoso de manto grueso doble que puede ser de cualquier color y motivo, siendo los colores blanco, gris y marrón los más comunes con marcas negras, grises o marrones.
Su color normalmente se va volviendo más oscuro según van creciendo.
El pelo de la cabeza hace que la cabeza parezca mayor de lo que realmente es, cubriéndole además los ojos.
Son estables, seguros y tienen una memoria excelente que puede ser trabajada, aunque esta raza puede dominar a su amo si éste tiene una voluntad débil.
Se adaptan bien en condiciones muy variadas y son populares como perros de compañía en apartamentos, pero necesitan un ejercicio moderado a diario.