Pedro III (¿?
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fue obispo de Oviedo desde el año 1322 a 1325.
Con este obispo pasó como con varios más y es que fue inhumado junto a la escalera que conducía a la zona de las reliquias y como posteriormente se construyó el enlosado de la Catedral, se perdieron prácticamente todos sus datos, fundamentalmente su sepulcro y lápida, sus memorias y datos de su pontificado.