Pedro Zavala

Ha sido escritor residente de Bridwell Library, en la Southern Methodist University, Dallas, Tx.

Es hijo del reconocido cirujano Ezequiel Zavala y de la pionera enfermera quirúrgica mexicana, Josefina Chaparro, a quien Zavala recuerda como una gran viajera y de la que ha destacado el interés por culturas lejanas.

"Mi madre viajó mucho a finales de los sesentas y durante todos los setentas.

Sus influencias literarias son diversas: Manuel Puig, Mary Shelley, Georges Perec, Judith Butler, Roberto Bolaño, Katsuhiro Otomo, Neil Gaiman, Alan Moore, Philip K. Dick, Ursula K. Le Guin, Horacio Castellanos Moya, Rodrigo Rey Rosa, Ricardo Piglia, Walter Benjamin, entre otros y otras.

[3]​ Zavala estudió Filosofía, Creación Literaria, Ciencias de la Comunicación y Teología en perspectiva decolonial.

Maestro en Estudios Latinoamericanos por la UNAM, Zavala ha dedicado sus investigaciones a la comprensión del pensamiento social de los movimientos religiosos para la liberación (Gustavo Gutiérrez, Leonardo Boff, Jon Sobrino, Juan Luis Segundo, Rubem Alves y en específico José Míguez Bonino), así como a las filosofías para la liberación latinoamericanas.

[4]​ Escribió la columna dedicada al cuento, Líneas de fuga para el diario Contra Réplica durante 2018 y 2019.

Lecturas wesleyanas en perspectivas contemporáneas[11]​ (2018), así como deGernsback, punkzine dedicado a la ciencia ficción[12]​ (2012).

La obra está definida por la distopía, la crítica los avances de la tecnología y la deshumanización constante.

Entendida así, la Ciencia Ficción como crítica de la realidad presente, en términos materiales y negativos sobre los que Zavala ha profundizado.

En donde la humanidad decadente, cyborgs, androides y robots conviven en una sociedad que termina por colapsar.

[18]​La escritora mexicana y académica, Cecilia Eudave ha dicho:«La voz narrativa de Pedro Zavala se distingue por su prosa inquietante, subversiva, que nos interpela como nuestros propios adversarios ahora disfrazados de amanuenses mecanizados, médicos zoomorfos, sujetos adictos a los nanonarcóticos, cyborgs, robots o simples seres del futuro penando en universos distópicos que ya no nos parecen tan lejanos.

La idea surgió como poner en común la ciencia ficción, entendida como una desilusión o crítica del presente.

Se añadieron también stickers y el empaque stencileado a mano que fue posteriormente sellado con una máquina rupestre.

Con Gernsback como objeto-punk nos referimos al punto en donde colinda lo artesanal con los procesos de producción tecnificados.