Perácio

Era semianalfabeto, apenas podía firmar su propio nombre.

Otro episodio notable de Perácio fue cuando suministraba su vehículo Packard en una estación de servicio, encendió un cigarrillo y tiró el fósforo al suelo, hecho que ocasionó la desesperación de su compañero Martim Silveira.

También se hizo famoso por otro caso: por lo general, acostumbraba a estacionar su Packard cerca del estadio con el volumen de la radio al máximo, debido a que le gustaba escuchar a los locutores de la radio decir «¡Gooool!

Durante la Segunda Guerra Mundial, sirvió en la Fuerza Expedicionaria Brasileña, y en 1944 fue a luchar del lado del Quinto Ejército Británico en la campaña de Italia.

Formó parte de la selección que obtuvo el tercer lugar en la Copa del Mundo de 1938.