Al inicio la publicación estuvo más enfocada en temas literarios y sociales, hasta que al año siguiente (1913) Manuel Calderón le vendió "El Cronista" al periodista Paulino Valladares, quién transformó el diario en un medio de propaganda combativa, contenía críticas, editorial y columnas, donde participaban diferentes intelectuales de Tegucigalpa, muchos de ellos escribían esporádicamente sin ser periodistas profesionales.
Los periodistas hondureños Alejandro Castro, Óscar Armando Flores Midence y Enrique Gómez, que empezaron a trabajar primeramente en "El Cronista", posteriormente se enrolaron en El Día fundado por Julián López Pineda, en 1948, este periódico fue uno de los más influyentes hasta 1960.
La prensa escrita en Honduras se inició en 1830 con la publicación de La Gaceta del Gobierno, luego que Francisco Morazán introdujera al país la primera imprenta.
El Premio Álvaro Contreras fue establecido en 1926 y es otorgado a escritores, políticos, periodistas nacionales e internacionales.
El Premio fue establecido mediante Decreto n.º 34[3] y emitido por el soberano Congreso Nacional de Honduras.