Se denomina permineralización al proceso tafonómico de fosilización consistente en la precipitación de minerales en los poros y oquedades de huesos, conchas o tejidos vegetales.
[2][3] Los minerales que precipitan pueden ser sulfatos, sulfuros, silicatos, óxidos de hierro, fosfatos y carbonatos.
[4][5] La permineralización suele ser el proceso por el que fosilizan los tejidos celulares más delicados.
Es relativamente frecuente la silicificación (sílex) de tejidos vegetales y más raramente de tejidos animales.
[5] La fosfatización (apatito) es característica de sedimentos marinos y la «piritización» (sulfuros de hierro como pirita o marcasita) lo es de sedimentos marinos de carácter reductor.