Muere solo y arruinado en Kutná Hora, donde está enterrado en la iglesia de Santa María.
También recibió influencias de Abrahama Godyna, Michaela Leopolda Willmanna, Jana Kryštofa Lišky y, sobre todo, Karel Škréta (1610 – 1674).
A aquellos siguieron los pedidos de instituciones eclesiásticas para obras religiosas con la que adquirió gran reputación.
Entre sus obras hay retratos, pinturas de género, imágenes religiosas y mitológicas.
En sus cuadros eligió producciones dramáticas, con el que combina luces y sombras.