En arquitectura un pirlán (se cree que procede de lat.
También se refiere a un escalón de piedra o madera.
[1] También se le llama mamperlán o mampirlán, que procede de mampostería (del latín: manus-positus ‘mano-poner’),[2][3][4][5] y que la RAE define como «listón de madera con que se guarnece el borde de los peldaños en las escaleras de fábrica».
Las tiras pirlán antideslizantes, disponibles para pegar o atornillar, son una solución eficaz para mejorar la seguridad en superficies resbaladizas tanto en interiores como en exteriores, reduciendo el riesgo de caídas y accidentes.
Su instalación es rápida, sencilla y altamente efectiva, proporcionando un excelente agarre en terrazas, cubiertas de barcos, rampas, escaleras y otras superficies propensas a volverse resbaladizas cuando están mojadas.