Tiene una peligrosidad media y su entorno es totalmente virgen pudiéndose acceder a ella por varios caminos peatonales de una longitud inferior a un km.
En este momento hay que dejar el coche para seguir a pie por una pista que se dirige al este de la Playa de Cueva.
Algo más adelante hay un camino descendente por el cual llegaremos a las dos calas.
Como actividades recomendadas, solo debe hacerse, y con prudencia, la pesca recreativa a caña.
Se aconseja que para recorrer el camino hasta los acantilados de la playa y acceder a ella se vaya provisto de pantalón largo y duro para evitar los pinchazos de las numerosos espinos y tojos que están casi cerrando el camino.