La actividad en el pleno de un consejo o legislativo, como un debate, puede ser contrastado con las reuniones y discusiones qué tienen lugar en las comisiones, para las que existen a menudo habitaciones (salas) de comisión separadas.
Los diputados no pueden hablar entre las líneas rojas del suelo que marcan los límites de cada lado.
Tradicionalmente, estas líneas están separadas por dos espadas para mitigar la posibilidad de un conflicto físico.
Si un miembro cambia de lealtad entre los dos bandos, se dice que cruza el piso o suelo.
Sólo los diputados y los funcionarios esenciales de la cámara, como los secretarios, pueden estar en el hemiciclo durante la sesión.