Pasan la mayor parte de su vida bajo la superficie, emergiendo cuando llueve o nieva, por lo que se les suele llamar escarabajo de la lluvia.
Anteriormente estuvieron clasificados en Geotrupidae, pero en la actualidad han sido asignados a su propia familia Pleocomidae, considerada un grupo hermano de todas las otras familias de Scarabaeoidea.
Son de colores que van del negro al rojizo-amarronado, mientras que sus pelos adoptan tonos del amarillo al rojo y negro.
Sus antenas poseen 11 segmentos, con un extremo abultado con cuatro a ocho lamellae, más que en ningún otro grupo de Scarabaeoidea.
Los detalles de la etapa larval solo se conocen para algunas especies; tienen nueve o más estadios y pueden tardar hasta 13 años en madurar.