Poncio acompañó a Cipriano al exilio en Cúrubis (actual Korba, en Túnez).
Otros estudiosos rechazan esta idea y consideran imposible que sea probado.
Los manuscritos están intitulados Vita Cypriani ("La Vida de Cipriano"), mientras que Jerónimo se refiere a ella como Vita et passio Cypriani ("Vida y martirio de Cipriano").
La referencia de Jerónimo no necesariamente se refiere al título, aunque está claro que el libro está dividido en dos partes, una sobre la vida de Cipriano y otra con los eventos que llevaron a su muerte.
Puede que Poncio conociera a Cipriano personalmente, aunque muchos lo niegan viendo la falta de informaciones detalladas en el libro.