Habita en ambientes serranos, tanto en el pedemonte como en altiplanicies más elevadas, en las provincias de Córdoba, San Luis y Santiago del Estero.
El fruto es una legumbre casi recta, lineal, con una longitud de entre 5 y 8 cm.
[1][2][3][4][5] Prosopis campestris fue descrito en el año 1874 por el botánico y fitogeógrafo alemán August Heinrich Rudolf Grisebach.
Etimológicamente, el nombre genérico Prosopis proviene del griego antiguo y podría significar ‘hacia la abundancia’ ("pros" = ‘hacia’ y "Opis" = ‘diosa de la abundancia y la agricultura’).
[6] El nombre específico campestris es un epíteto latino que significa 'del campo'.