Protógenes (siglo IV a. C.) fue un antiguo pintor griego, rival y contemporáneo del famoso Apeles.
Nació en Cauno, en la costa de Caria, en la actual Turquía, residió en Rodas en la segunda mitad del siglo IV a. C. Fue en su época un pintor muy admirado por su minuciosidad y el complejo acabado con el que culminaba sus obras, tanto dibujos como pinturas.
Apeles, su gran rival, impactado frente a una de sus obras tan sólo pudo consolarse diciendo que “esperaba la inspiración”.
Esta pintura todavía permanecía en Rodas en tiempos de Cicerón, posteriormente fue trasladada a Roma, donde se perdió como consecuencia del incendio del Templo de la Paz.
Esta pintura fue vista por Plinio el Viejo en Roma, donde fue muy admirada y donde también ardió.