Constituyen uno de los alérgenos más importantes existentes en las frutas pertenecientes a la familia de las rosáceas, incluyendo el melocotón, manzana, pera, albaricoque, cereza y ciruela, también están presentes en los frutos secos y numerosas verduras.
Se encuentran en las plantas superiores, presentándose a concentraciones elevadas en la piel de los frutos.
Son capaces de atravesar la barrera inmune gastrointestinal humana y desencadenar la secreción de inmunoglobulinas IgE específicas, provocando reacciones alérgicas y anafilácticas.
Además del melocotón, numerosos alimentos de origen vegetal y consumo habitual contienen diferentes proteínas transportadoras de lípidos que pueden provocar reacción cruzada debido a sus similitudes estructurales, entre ellas la Mal d 3 presente en las manzanas.
La siguiente tabla resume los principales alimentos que pueden contener proteína transportadora de lípidos:[3][4]