Protréptico de Aristóteles

[2]​ Durante la antigüedad, el Protréptico fue posiblemente el escrito más admirado e imitado de Aristóteles.

Del Protréptico solamente tenemos los fragmentos que se han conservado en las obras de otros autores antiguos.

El hecho de que la obra fuera dedicada a Temisón, el rey de los chipriotas,[3]​ hace suponer a algunos que pudo ser escrita poco antes del año 351/350 a. C., cuando las colonias griegas en esa isla intensificaron sus relaciones con Atenas, previendo la inminente entrada en guerra contra los persas.

Cicerón escribió un diálogo, el Hortensio, que era más o menos una paráfrasis retórica del Protéptico.

[11]​ El filólogo Werner Jaeger declaró: "En el Protréptico encontramos al hombre que aprendió a ver el mundo con los ojos de Platón".

Busto de Aristóteles del palacio Spada en Roma .