Provincia eclesiástica de Zaragoza

La diócesis de Zaragoza fue restaurada en 1118 durante la Reconquista.

[1]​ Bajo su provincia eclesiástica quedaron las diócesis sufragáneas de Huesca, Tarazona y Segorbe-Albarracín, Pamplona y Calahorra, pertenecientes a los reinos de Aragón, Valencia, Navarra y Castilla.

En 1574 la diócesis de Burgos fue elevada a archidiócesis, pasando a su provincia eclesiástica las diócesis de Calahorra y Pamplona.

Segorbe-Albarracín se segregó en dos diócesis: Albarracín (que más tarde se uniría con Teruel) y Segorbe (que pasó a ser sufragánea de la provincia eclesiástica de Valencia).

Los últimos cambios se realizaron entre 1995 y 1998 con la incorporación a Barbastro de los pueblos oscenses que dependían de Lérida.

Provincia eclesiástica de Zaragoza