A diferencia del hiperaldosteronismo, no involucra niveles aumentados de aldosterona.
Entre las causas dietarias existe la secundaria al consumo crónico y excesivo de regaliz.
[2] El regaliz inhibe la 11-beta hidroxiesteroide deshidrogenasa tipo II resultando en una inapropiada estimulación de los receptores mineralcorticoides para el cortisol.
La causa genética más frecuentemente asociada es el síndrome de Liddle.
[3] Se presenta clásicamente con hipertensión, hipocalemia (secundario a kaliuresis excesiva) y niveles bajos de renina