Su sociedad ritual se conoce como Gor, que en lengua dan significa leopardo[5][6].
La tradición clánica es patrilineal, practican la poligamia y se organizan por linajes en los barrios de los centros urbanos o aldeas.
A las mujeres se les da una pequeña parcela de tierra en la que cultivar sus propias hortalizas para usarlas en el hogar o venderlas en el mercado[1].
[2] En la división del trabajo los hombres son los responsables de la roturación en la agricultura, la caza mayor, y la pesca.
Estos animales se comen solo en ocasiones rituales o algún gran banquete social.
[7] Las aldeas gio se dividen en barrios, cada uno de los cuales alberga una familia extensa o un linaje.
Los niños iniciados en la sociedad están preparados para encontrarse con los misterios del mundo espiritual y aprender las reglas de los hombres adultos.
En cambio, un poder espiritual llamado Du actúa como mediador entre la gente y el dios supremo.