Puente de San Antón (Bilbao)

Se cree que, incluso, es anterior a la fundación de la Villa en el año 1300.

Los bilbaínos emplearon todos los recursos legales, y hasta violentos, para impedir que otro puente les arrebatara el monopolio en las comunicaciones entre las dos orillas.

En el siglo XV, bajo este puente se empozaba a los delincuentes.

Y para poner fin al problema, el Ayuntamiento decidió sustituirlo a finales del siglo XIX, hacia 1870, por uno nuevo, que sería el actual situado, a diferencia del anterior, por delante de la iglesia de San Antón (aguas abajo) y que empezó a funcionar hacia 1880, después de sufrir las consecuencias de la última guerra carlista.

Fue reedificado, una vez más, en 1937, después de su voladura durante la guerra civil española.