En 1870 se construyó el estratégico Puente de la Almozara, que permitió unir las hasta entonces vías inconexas Madrid-Zaragoza, Alsasua-Zaragoza y Zaragoza-Barcelona (por Lérida).
También dio pie a las comunicaciones ferroviarias entre Zaragoza y Huesca.
Con la llegada de la alta velocidad ferroviaria a la ciudad en 2003 se edificó un nuevo puente justo al lado de este, que fue demolido cuatro años después.
Tanto la construcción del nuevo como la demolición fueron sufragadas por Zaragoza Alta Velocidad, empresa pública con la que Ayuntamiento, DGA y Fomento llevaron a cabo la renovación ferroviaria.
Esta en estudio su uso para un corredor de Cercanías por Las Fuentes, Vadorrey y La Jota.