En psicología es una persona adulta cuya vida emocional se ha mantenido en un nivel adolescente, también conocido como el síndrome de Peter Pan.
[1] El término puer aeternus procede de Las metamorfosis, una obra épica del poeta romano Ovidio (43 a. C.–17 d. C.), consistente en narraciones mitológicas griegas y romanas, en la cual Ovidio se dirige al dios-niño Yaco como puer aeternus y lo alaba por su papel en la celebración de los misterios eleusinos.
[4] Como todos los arquetipos, el puer es bipolar, exhibiendo un aspecto tanto positivo como negativo.
También presagia al héroe en el que a veces se convierte (p. ej.
El lado negativo es el hombre-niño que se rehúsa a madurar y afrontar los retos de la vida, esperando en vez de resolver sus problemas.