La pulpa de remolacha es un subproducto de la industria del azúcar en las regiones templadas.
De hecho, la principal fuente de azúcar alimentaria en estas regiones es la remolacha azucarera.
Durante la extracción de azúcar, las raíces son estrujadas y el jugo dulce es recuperado por ósmosis.
Puede ser utilizada como una pasta rica en agua (con un 15 a 20% de materia seca) y que debe ser en general ensilada, o como pulpa desecada envasada en "tortas" que luego pueden ser incorporadas a los piensos compuestos.
Su uso como alimento fresco para las vacas lecheras cuya leche se convierte en queso es sin embargo delicado, debido a la presencia frecuente de esporas de las bacterias butíricas (contaminación con el suelo y las condiciones de almacenamiento), factores que dan mal gusto y causan la ruptura de los quesos.