Apasionada de la fotografía desde niña, se compró una cámara Kodak con el dinero que ganó en un concurso.
Primero Pueblo-Valladolid y más tarde Pueblo-Vallecas hasta terminar en la redacción central del periódico.
Estaba por allí el padre Llanos, un jesuita muy reivindicativo, y el ambiente era de continua manifestación.
También publicó su obra en medios internacionales como Paris Match, Der Spiegel o The Times.
Fotógrafa realista, prefería la naturalidad buscando la complicidad de la persona a la que fotografiaba.