Este ejemplar de Quercus faginea es representativo de la vegetación autóctona mediterránea, es bastante común en Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia.
[1] Fue declarado monumento natural por la Junta de Andalucía en el año 2001.
[2] El entorno donde se emplaza este monumento natural está constituido por montes de sierras superiores a los 1700 metros de altitud y se caracteriza por la abundancia de quercíneas (alcornoques y quejigos) y coníferas de repoblación (pino laricio y pino carrasco).
En estratos inferiores se sitúan otras especias integrantes del paisaje como el rosal silvestre (Rosa canina) y el espárrago (Asparagus acutifolius).
Como la del escritor Antonio Gala, en El Imposible Olvido:[3] El quejigo del Amo o del Carbón está incluido en una ruta de senderismo específica de quejigos centenarios por la sierra sur de Jaén.