Se graduó como bachiller en La Sorbona y se licenció en Derecho en la Universidad de Salamanca, tras lo cual se instaló en 1890 en la ciudad de Oviedo donde tenía lazos familiares.
Sin embargo, por su formación y cultura fue requerido para dar cursos y conferencias en la recién nacida Extensión Universitaria de la Universidad de Oviedo que versaron sobre sus campos de interés: la lengua y mitología griegas, música clásica y literatura francesa.
A una de estas conferencias, en concreto sobre Charles Baudelaire, asistió un joven Ramón Pérez de Ayala sobre el que tuvo una gran influencia literaria y con el que cultivó una gran amistad.
Tradujo del griego la Ilíada y la Odisea, que fueron elogiadas por Ramón Pérez de Ayala, Emilia Pardo Bazán y Azorín, aunque no llegaron a ser publicadas.
En 1906 publicó su única obra, de tono satírico, titulada Crímenes literarios y meras tentativas escriturales y delictuosas bajo el seudónimo Iscariotes Val de Ur que mereció elogios de, entre otros, Benito Pérez Galdós y Azorín.