Reclutado en Wolsoon, su planeta natal, Qarrigat fue el tercer representante de los Guardianes en ser enviado a Apokolips (los dos anteriores, un robot Manhunter y la Linterna Verde Kendotha Kr’nek, jamás regresaron).
Sin importarle sus heridas y su derrota, el Linterna Verde recomendó a los Guardianes una invasión al planeta para acabar con el gobierno de Darkseid.
Qarrigat y otros LVs viajaron a través del cosmos en búsqueda de candidatos para la gran guerra que se aproximaba.
Los Guardianes anunciaron una tregua y un acuerdo con Darkseid por el cual ninguna de las dos partes podía interferir en el territorio del otro.
Cuando estaban por irse, Ash-Pak-Glif, un Linterna Verde, le entregó a Qarrigat en secreto un anillo y una batería.