Aproximadamente ocho años más tarde, Rambo tiene dificultades para adaptarse a la vida como civil y decide realizar unos viajes por Estados Unidos.
El antiguo oficial al mando de Rambo, el coronel Sam Trautman, advierte a las autoridades del riesgo de intentar capturar a Rambo, dada su experiencia en combate.
Rambo, sabiendo que sus perseguidores le creen muerto, se escabulle por los túneles y encuentra otra salida cerca de la carretera principal del pueblo.
En el pueblo, Rambo atrae al sheriff destruyendo una gasolinera, postes de teléfono y una tienda local para confundirlo psicológicamente.
Rambo localiza a Teasle sobre la azotea de la comisaría y dispara al techo hasta hacerlo caer malherido.
Hay, sobre todo, dos grandes diferencias entre la novela original y la adaptación cinematográfica.
La primera corresponde al trato del personaje: Rambo se comporta en la novela como un frío asesino que se siente perseguido, y acaba con la vida de bastantes de sus perseguidores; en cambio, la película muestra que las (pocas) muertes que causa Rambo nunca son de forma directa.
En las novelas, durante la mayor parte de los capítulos que pasan por las vivencias de Rambo, se identifican más o menos claramente dos maneras de pensar diferentes (aunque esta diferencia es más bien difícil de notar, debido al lenguaje que usa cada una): una que trata de incitar a Rambo primero a razonar y luego a "entrar en acción" y otra que, o se resiste ,o lo evade, o se niega, exponiendo argumentos con que pretende lograr este objetivo.
En el pequeño pueblo inglés de Hungerford, un hombre armado empezó a disparar en la calle, causando 16 muertos y numerosos heridos, para después suicidarse (hecho conocido como la Masacre de Hungerford).
Mucha gente usó este incidente como demostración de que las películas violentas, particularmente la saga Rambo, tenían un peligroso impacto en las personas.
La banda sonora original de las tres películas fue compuesta y dirigida por Jerry Goldsmith.