Raymundo Jardón

A los tres días de nacido recibió el sacramento del bautismo en la Parroquia de San Francisco en Tenancingo.

Francisco Plancarte y Navarrete lo llevó al seminario de dicha ciudad, y al ser nombrado Arzobispo de Linares determinó llevarlo también con él.

[2]​ Cantó su primera misa en Cuernavaca para después trasladarse a Monterrey y ejercer su ministerio como párroco de la Catedral.

[3]​ Durante la persecución religiosa, fue desterrado del país en dos ocasiones.

[1]​ Una gran cantidad de personas se hizo presente durante su funeral, se dice que cuando los primeros carros del cortejo fúnebre llegaron al Panteón del Carmen los últimos apenas estaban saliendo de la Catedral de Monterrey, una distancia equivalente a veinte cuadras.