Se realiza mediante una ecografía transvaginal, por lo que es un método no invasivo e indoloro.
Durante la formación del folículo ovárico (o foliculogénesis), el proceso completo dura dos meses y medio, es decir, los óvulos que se liberan en cada ciclo comienzan a madurar mucho antes de que se produzca la ovulación.
El resultado permite hacer una estimación de la reserva ovárica, aunque esta información se debe complementar con los niveles de la hormona antimülleriana (AMH) en sangre, cuyo valor debe estar entre 1 y 3 ng/ml.
El COS se hace de forma previa a la Fecundación in vitro (FIV) o a la Inseminación Intrauterina (IUI), en este último caso se hará una estimulación suave para evitar que maduren más de uno o dos folículos.
De esta forma, si la reserva ovárica es normal la respuesta al tratamiento de estimulación controlada será normal, pero si la mujer presenta baja reserva ovárica esta respuesta puede ser subóptima[3].