Relación ventilación-perfusión

[1]​ Suele expresarse como V/Q, donde V es ventilación pulmonar y Q es flujo o perfusión sanguínea.

Esta relación puede estar aumentada, cuando el alvéolo funciona normalmente pero, por algún motivo (por ejemplo trombosis pulmonar) no hay un flujo adecuado de sangre.

En el extremo opuesto, la relación ventilación/perfusión puede estar disminuida si partimos de una circulación pulmonar normal, pero con alvéolos obstruidos o colapsados.

En estas circunstancias la sangre alcanza perfectamente esos alveolos que carecen de ventilación y en los cuales no puede realizarse ningún intercambio respiratorio.

La relación ventilación/perfusión idónea (o máxima) en un pulmón, en condiciones normales, se alcanza a una altura media de este, más concretamente a la altura del corazón.