La repostería marroquí es reconocida y se puede encontrar en todo el país, acompañando un té atay o un café.
Sin embargo la repostería marroquí alcanza todo su esplendor en los eventos especiales, como bodas y fiestas religiosas.
[1][2] Durante el Ramadán, las amas de casa en Marruecos cocinan shbaquías, baklavas, makruds, cuernos de gacela o sel-lu.
en abundancia, para luego regalarlo a los seres queridos y comerlo en el iftar.
Algunos ingredientes típicos en la repostería de este país son la miel, la sémola, la harina, las almendras, y por supuesto, el azúcar.