El retorno social de la inversión (RSI o SROI, por sus siglas en inglés) es un método para medir el valor extra-financiero (como el valor ambiental o social que actualmente no se refleja en las cuentas financieras convencionales).
El método SROI considera las opiniones de las partes interesadas sobre el impacto, y asigna valores financieros a todos aquellos impactos identificados por las partes interesadas que típicamente no tienen valores de mercado.
En cambio, el análisis del costo-beneficio es una técnica arraigada en la ciencia social que es utilizada con mayor frecuencia por los inversores externos a una organización para determinar si su inversión o donación es económicamente eficiente, aunque la eficiencia económica también debería abarcar consideraciones sociales y ambientales.
Los desarrollos en el Reino Unido llevaron a un acuerdo entre Social Value International y Social Value UK sobre principios básicos del SROI, los cuales son los siguientes: – Involucrar a las partes interesadas.
En este caso, las etapas necesarias según The Social Consulting Agency son las siguientes: