Retrato de Juliano II de Médicis

que muestran algunas diferencias con la estatua conocida y que han sido interpretados como copias del proyecto original de Miguel Ángel, quizás a partir de un boceto.

En estos la figura está desnuda, como generalmente se hacía en fase de estudio, con el torso más girado hacia la izquierda y con el pie derecho que apoya sobre un objeto que luego fue eliminado.

La obra, insertada en un nicho, muestra el joven duque sentado, vestido como un antiguo general romano y en actitud fiera, como anotó Vasari, contrapuesto al "melancólico" Lorenzo.

Algunas lecturas políticas han adoptado la idea del déspota volitivo y violento.

La coraza se adhiere al cuerpo como una vaina que revela el busto musculoso así como los zapatos altos desaparecen a lo largo de la espinilla para mostrar los pies desnudos.