Reconocido por sus contribuciones a las artes, fue una figura significativa en la escena artística de Albania y Kosovo.
[1] La obra de Ferri se caracteriza por su estilo distintivo y profundos elementos temáticos, a menudo reflejando el contexto cultural e histórico de Albania y Kosovo.
[3][4] Su influencia se extendió más allá de la creación artística.
Se dedicó a formar a futuras generaciones de artistas al servir como profesor en la Academia de Artes Figurativas en Pristina.
Su pasión por el arte y su compromiso con la educación indudablemente moldearon el desarrollo artístico de muchos artistas kosovares.