La jueza del tribunal lo describió como un sujeto "peligroso, profundamente perturbado y pervertido sin sentido de la realidad".
Además, la jueza dijo que, en su opinión, "no debería ser puesto nunca en libertad".
[5] Sinaga nació en Jambi, Sumatra, Indonesia, en el seno de una familia católica.
Su madre asistió a la primera audiencia, pero se ausentó del resto de los juicios.
Los invitaba a su apartamento, donde los drogaba con ácido γ-hidroxibutírico y luego los agredía sexualmente mientras estaban inconscientes.