Ricardo Tormo

Compitió con diversas marcas a lo largo de su carrera, entre ellas destacan: Bultaco, Kreidler, Garelli, Sanvenero, MBA y Derbi.

Ricardo Tormo Blaya era menor de edad cuando consiguió un segundo puesto en su estreno como piloto federado en Cullera (Valencia) el año 1971.

Para asignar estas motocicletas, debido a la alta demanda, Derbi organizó unas jornadas de entrenamientos en el circuito del Jarama.

Durante los entrenamientos, Tormo logró marcar el mejor tiempo entre todos los participantes, superando a destacados pilotos como Manolo Varea, Emilio Gracia, Enrique Escuder y Pascual Royo, entre otros.

[1]​ En 1973, Tormo obtuvo la licencia senior, lo que le permitió competir en categorías superiores del Campeonato de España.

A lo largo del campeonato, mostró un rendimiento constante, finalizando en la cuarta posición en 50cc, detrás de Benjamín Grau, Jaime Alguersuari y Ángel Nieto.

Una descalificación en el circuito del Jarama por cambiar de moto sin autorización afectó su clasificación final.

Sin embargo, logró participar en las "24 Horas de Montjuïc", formando equipo con Jaime Alguersuari en una Bultaco 360, aunque tuvieron que abandonar la carrera debido a una caída.

Al finalizar la temporada, Tormo alcanzó el tercer puesto en el campeonato de 50cc, superado solo por Ángel Nieto y Benjamín Grau.

Este logro fue particularmente significativo, ya que coincidió con un momento crítico en su carrera, cuando se encontraba sin moto para competir en el Campeonato Mundial debido a los problemas de la fábrica Bultaco.

Este año fue particularmente notable por su capacidad para manejar varias categorías de cilindrada a la vez y mantener un rendimiento destacado en ambas competiciones, nacional e internacional.

A lo largo de la temporada, Tormo mostró un rendimiento consistente, destacándose en varios Grandes Premios.

Bajo condiciones de lluvia, dominó la carrera y terminó en primer lugar, con Ángel Nieto en segunda posición.

Tormo afirmaría más tarde que aquel día sentía una gran presión en Anderstorp porque su equipo, Bultaco, le había encomendado la victoria.

Durante la temporada, Ricardo Tormo logró cinco victorias en los Grandes Premios de las Naciones (Mugello), Bélgica (Spa-Francorchamps), Alemania Occidental (Nürburgring), Checoslovaquia (Brno), donde ya se proclamó campeón matemáticamente, y Yugoslavia (Rijeka), además de obtener varios segundos puestos en España (Jarama) y Países Bajos (Assen).

Estos resultados le permitieron asegurar el título mundial de 50 cc, convirtiéndose en el segundo piloto español en lograrlo tras Ángel Nieto.

Posteriormente, Tormo descubrió que el asalto había sido perpetrado por el delincuente "El Vaquilla", quien fue arrestado tiempo después.

Se trataba de una edición limitada producida por el motoclub Cullera y Tormo le había regalado algunas a Mateos poco antes del incidente.

La familia Bultó ya no pudo volver a tomar el mando y la empresa se convirtió en una cooperativa laboral que sobrevivió hasta 1983.

Sin embargo, confiaba en que las Bultaco, con un buen mantenimiento y un equipo de confianza, podían ser competitivas.

El proyecto recibió un impulso clave cuando Motul, representada por Ángel Pons, accedió a patrocinar la iniciativa, cubriendo los gastos.

La lesión impidió a Dörflinger competir y continuar la temporada y Tormo se proclamó Campeón del Mundo de 50 cc en la penúltima carrera del Mundial que tuvo lugar en Imola (Gran Premio de San Marino)[6]​.

[9]​ Además, ese año, Tormo cedió sus motos a un joven piloto llamado Jorge Martínez "Aspar", permitiéndole participar en el Campeonato de España, lo que resultó crucial para su posterior éxito en el motociclismo.

Ese año, la escudería Garelli enfrentó un problema inesperado: Eugenio Lazzarini, su principal piloto en la categoría de 50cc, sufrió una grave caída en el Gran Premio de Yugoslavia, donde se fracturó varias costillas y se lesionó las manos y la cara.

Ese Gran Premio estuvo marcado por la trágica muerte de Rolf Rüttimann en un accidente durante la carrera.

En esta ocasión, Tormo logró una notable victoria en la categoría de 50cc, superando a Dorflinger, quien finalizó segundo.

El circuito permanente más cercano, Calafat, no ofrecía las condiciones ideales para los ensayos, especialmente por la falta de una recta suficientemente larga.

Mientras rodaba a más de 160 kilómetros por hora, un vehículo Simca 1200 ajeno al equipo ingresó inesperadamente en la zona donde se realizaban los ensayos.

En 1987, asumió la dirección del equipo español para el Campeonato Europeo de Motociclismo, en el que los pilotos Julián Miralles y Alex Crivillé , que competían para Derbi, quedaron en primera y en tercera posición, respectivamente, en clasificación final.

En 1994, fue condecorado con la más Alta Distinción de la Generalidad Valenciana y editó, en colaboración con el periodista Paco Desamparados, un libro autobiográfico titulado "Yo Ricardo.