Richard Guino

Su trabajo es una oda a la feminidad que revela la idea mediterránea de la belleza.

Hijo de un ebanista, sus padres lo enviaron a un colegio marista, donde recibió una educación extremadamente rígida.

Guino participó en exhibiciones colectivas en Gerona en 1908 y en Barcelona en 1910, donde Aristide Maillol, 30 años mayor que él, lo descubrió.

Así, Guino se mudó a París en 1910, en un estudio localizado en la calle Daguerre en Montparnasse.

Vollard había despertado en Renoir la inquietud de explorar la escultura, sin embargo, el pintor francés se hallaba disminuido por la artritis.